Páginas

miércoles, 1 de febrero de 2012

Dieta enero

¡Hola chicas! Este es una entrada que escribo muy gustosamente. ¿Os acordáis que a principio de año dije que era hora de volver a los viejos propósitos y adelgazar? Pues me puse manos a la obra, y en un mes he perdido 5 kilos 400 gramos. Está muy bien, ¿verdad? Estaría dando saltitos de alegría pero sigo acatarrada y respiro con una única fosa nasal y el oxígeno no me llega a nada. ^_^

Poco a poco me acerco a mi objetivo de perder el 5% de mi peso. Cada vez lo veo más cerca. ¿Por qué el 5%? Primero porque es una meta objetiva y factible, solo el 5%, pero además, a las personas obesas si perdemos esa cantidad se  nos traduce en una mejora considerable de nuestra salud ya que reducimos niveles de colesterol, se controlan nuestros niveles de azúcar, mejora la movilidad y la respiración ( oh sí, por favor); nos ayuda a dormir mejor y si la padecemos, reducir la apnea del sueño; también disminuyen las  posibilidades  de una muerte súbita o un ataque al corazón; ayuda  a prevenir la angina de pecho y si tomamos medicinas puede que ya no nos hagan falta (consultando siempre al médico), incluso al perder este peso reducimos un poquito las posibilidades de que nos toque premio en la tómbola del cáncer.

Para alcanzar mi cinco por ciento solo me queda perder 3kg 700 gr. Parece alcanzable. Pero no pongamos el carro delante de las mulas, ni me quiero contar el cuento de la lechera. Hacerlo para mí significa que algo empieza a ir mal, es como la maldición de los cuartos de final de la selección española de fútbol. ¿Os acordáis? Cuanto más ilusionados estábamos, cuanto más crecidos, venía otro equipo y en cuartos nos mandaba para casa, pero parece que últimamente hemos roto ese maleficio, y precisamente eso es lo que deseo que pase conmigo. Quiero que se me rompa el maleficio, así que para no tentar a la Suerte no voy a vender la fruta antes de cosecharla, y me congratulo solo en que he perdido casi cinco quilos y medio. (¿Solo? no, no, nada más y nada menos)

No he hecho nada especial. Incluso los fines de semana cuando  salgo con mi marido cae un kebab  o  otra recompensa y alguna vez a la semana en casa cenamos bocadillo, pero de verdad,  media barra de pan  cada uno. ¿Cómo he adelgazado?? He aumentado mucho la ingesta de frutas y verduras. Bocadillos sí, pero con su lechuga y tomate,  y a poder ser con cebollita. Me he convertido en la principal consumidora de naranjas, mandarinas, fresas y manzanas del estado, ya que es la fruta que más me gusta y a la que puedo acceder en este momento. Otra clave es que he cocinado mucho en casa (menos estos dos días que he estado encamada) y así es muy fácil controlar con cuanto aceite cocinas y cuanta verdurita pones en cada plato.

Pero creo yo que lo más importante ha sido el deporte. Después de un diciembre donde había dejado el gimnasio por completo, he vuelto a él con muchas ganas o con menos ganas y conducida por mi guardiana, y he sudado a gusto. ¡¡¡Silvia, quiero volver!!! Lo echo muchísimo de menos.  Además quiero clases de baile. 

La semana pasada en nuestro gimnasio pusieron una clase de bailes latinos a una hora asequible, y creo que jamás me lo he pasado tan bien, como esa horita escasa bachateando. Salí de allí sudada como una cerdita, pero con las endorfinas por las nubes, hubiera seguido saltando y bailando todo el fin de semana, pero me he acatarrado. :_((
Bueno, ya os he puesto al día con la dieta. Espero que vuestros propósitos también se vayan cumpliendo. Un besazo y nos leemos muy pronto.

1 comentario:

  1. Así me gusta campeona!!! Haremos nuestro el lema de la selección, PODEMOS!!
    Recupérate pronto que te echo de menos
    Un beso!!

    ResponderEliminar